Mancharse la ropa cuando uno come es uno de los peores momentos por los que se puede pasar, más si estamos con prendas delicadas de una colección única o en una reunión sin tener mudas de vestimenta. Pero aún peor es mancharse con salsas de tomates o ketchup. Estas sustancias son unas de las más difíciles de quitar de las prendas.
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En muchas ocasiones, estas manchas tan difíciles de retirar por el pigmento que dejan en los tejidos, suelen quitarse con productos químicos fuertes. En otras podemos acudir a maniobras caseras con bicarbonato de sodio, vinagre o zumo de limón. Lo cierto es que las telas de la ropa manchada pueden terminar notablemente desgastadas o dañadas en el proceso.
Dentro de esta particular situación de mancharse la ropa, la marca Heinz junto a la plataforma thredUP ha querido reivindicar el ridículo para pasar a lucir con orgullo las prendas que contengan manchas de ketchup. La colección Vintage Drip propone con 157 prendas, exhibir la suciedad roja sin vergüenza por la vida.
La ropa manchada de la colección Vintage Drip de Heinz es de segunda mano y presenta una pequeña suciedad ocasionada por ketchup. El concepto que enfatiza la marca es que no hay que descartar estas prendas, menos si son de Gucci, por ejemplo. La vestimenta promocionada por la marca de condimentos se exhibe en todos los tamaños (del XXS al XXL) y no tiene género.
La recaudación de la venta de esta colección se destinará a Rise Against Hunger, una ONG sin fines de lucro que está presente en la problemática de desnutrición y hambre en el mundo. La campaña está dirigida a las nuevas generaciones que se preocupan más por la sostenibilidad. “Para los amantes de la moda y los amantes de la comida”, mencionó Erin Wallace, vicepresidenta de marketing de thredUP, cuando le consultaron por el público objetivo. Además dejó claro que el objetivo es que se ayude “al bienestar de las personas y del planeta", según recoge el medio 20 Minutos.