Al percibir una picadura de insecto en nuestra piel, es necesario tomar con calma la situación y no empeorar los malestares que se puedan producir, como enrojecimiento, ardor, picazón, inflamación o supuración. Lo ideal es no rascarse con brusquedad y en caso de dolor y mayores molestias, acudir a un médico.
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Si bien existen cremas tópicas específicas para calmar estos malestares causados por las picaduras de insectos, también hay remedios caseros y naturales que puedes implementar de urgencia. Uno de ellos es utilizar un ingrediente cítrico y nutritivo: el limón. En este caso, lo mejor que puedes hacer es exprimir el zumo y mojar un algodón con el líquido.
Luego aplica el algodón empapado de zumo de limón sobre la zona afectada por una picadura en tu piel y notarás que se reducirá el escozor. Además, este cítrico es un excelente desinfectante de heridas. Otro de los ingredientes que seguro tienes en casa y sirve para aliviar estas dolencias es la miel, un alimento que no puede faltar en el hogar para ingerir en distintos procesos de enfermedades respiratorias.
La miel es ideal para combatir las dolencias de las picaduras de insectos como hormigas, mosquitos o abejas. Este alimento es antiséptico y también tiene un efecto antibiótico. Para aplicar el método con este ingrediente, solo cubre la piel con esta sustancia y deja que se seque. Luego retira con agua tibia suavemente.
Finalmente, otros ingredientes que puedes utilizar cuando tengas escozor, enrojecimiento e inflamación son la aloe vera y el bicarbonato de sodio. Mientras que la planta mejorará notablemente el aspecto de tu piel, ya que es hidratante y cicatrizante; el polvo blanco actuará neutralizando la sensación de ardor y picazón. En el primer caso extrae la savia del vegetal y colócalo en la zona afectada. En el segundo, mezcla una cucharadita de esta sustancia con un poco de agua y aplica en la región dérmica durante 15 minutos.