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Prepara un insecticida casero infalible con esta planta venenosa

Una planta con muchas propiedades beneficiosas para el cuerpo humano, se puede transformar en un excelente insecticida.

Ortiga.Fuente: Instagram @fincalasheras
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La ortiga es una planta que a pesar de ser muy beneficiosa para nuestro cuerpo, ya que es utilizada con fines medicinales, resulta también “venenosa” al primer contacto. Este ejemplar que también se incluye en recetas y en farmacología, posee unos pelos en sus hojas que producen urticaria en contacto con nuestra piel. Esto se debe a que contiene acetilcolina, la responsable de producir irritación. 

Preparar un insecticida casero con esta planta que provoca dicha reacción en contacto con el cuerpo humano es muy sencillo, ya que solo requiere que tengas un litro de agua y 100 gramos de ortiga fresca (en el caso de que dispongas de la hierba seca, tienes que disponer de 20 gramos). Es importante destacar que debes utilizar guantes para manipular este ejemplar vegetal. 

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Una vez que dispongas de la planta fresca en un recipiente con agua, debes iniciar un proceso de maceración. Para que el resultado sea efectivo, tienes que remover esta mezcla de ingredientes todos los días, durante un periodo de tiempo de dos semanas en el invierno y solo 10 días en los meses de verano. Esto reside en el hecho de que necesitas que fermente la preparación, con el oxígeno adecuado. 

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Es muy importante mencionar que para este proceso la mezcla debe estar tapada, no debe ingresar al recipiente ningún tipo de microorganismo exterior, ni muchos menos algún insecto. Cuando la base del insecticida con esta planta venenosa esté en su mejor momento para seguir con el otro paso, te darás cuenta porque debe estar fermentada. 

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El paso final del proceso de elaboración de este insecticida casero infalible con ortiga es mezclar 2 litros de esta fermentación con 10 litros de agua. Esto resultará muy efectivo si tienes plagas de insectos en las plantas de tu jardín. La frecuencia de colocación deberá ir de entre 10 a 15 días, según el estado en el que encuentres a tus ejemplares vegetales en casa, y debes hacerlo con un recipiente pulverizador.