El baño es uno de los sitios donde hay que hacer una limpieza general y frecuente, ya que además de bacterias o gérmenes que puedan desarrollarse, también es un cuarto donde se acumula mucho sarro o cal proveniente del agua circulante. Cabe mencionar que también es necesario quitar manchas o restos de productos para no atraer insectos como las cucarachas.
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El cabezal de la ducha es una de las piezas del baño que más limpieza requieren cada cierta cantidad de tiempo. Como circula permanentemente agua, llena de minerales y sales, se terminan tapando los hoyos del artefacto con sarro y eso impide su óptimo funcionamiento y, por lo tanto, no podemos hacer uso de la ducha eficientemente.
Un ingrediente infalible para quitar el sarro acumulado en el cabezal de la ducha es el vinagre blanco, que también es un producto que está en la alacena de casi todas las cocinas. Para quitar este tipo de suciedad solo debes retirar esa sección del utensilio y sumergirla en un recipiente donde puedas verter este líquido ácido.
Lo ideal es que dejes en remojo el cabezal con sarro durante al menos 30 minutos para lograr ablandar este tipo de suciedad. Luego puedes ayudarte con un cepillo para limpiar las partes más diminutas o simplemente quitar algunos restos que hayan quedado del proceso de inmersión de la pieza en vinagre.
El paso siguiente de esta maniobra de limpieza del cabezal de la ducha será enjuagar toda la pieza y secar bien con un trapo limpio que esté seco. También puedes usar el vinagre para limpiar otras partes del baño: grifos, mamparas, azulejos o juntas. El poder del ácido acético es tal que puedes optar por este ingrediente natural, antes de gastar dinero en productos más costosos.