Las hortensias son esas hermosas flores en forma de ramillete que suelen usar las novias en sus bodas, o que podemos encontrar grandes canteros utilizados para decorar diferentes espacios. Por lo general estas plantas si no están separadas tienen el mismo tono, aunque esto es algo muy sencillo de cambiar con un método muy sencillo y económico que te contamos a continuación.
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El color se puede cambiar solo en algunas especies de hortensias, principalmente en aquellas relacionadas con hydrangea macrophylla o hydrangea serrata, y aunque es muy común pensar que el tono de la flor de debe al pH del suelo, los expertos indican que esto lo determina el ácido del suelo que hace que la tierra libere aluminio y sea absorbido por las plantas.
Por lo tanto con un pH bajo tendremos un aluminio soluble, dando como resultado un color azul a tus hortensias, y si el pH es más alto bloqueara el aluminio y las flores serán de tonos más rosa. También se pueden ver tonos de crema a verde cuando se abren por primera vez, y estos pueden cambiar a medida que las flores envejecen.
Para hacer que los sépalos sean más azules, agrega sulfato de aluminio al suelo y mantén los niveles de fósforo bajos, niveles moderados de nitrógeno y niveles altos de potasio. Para hacer que las hortensias sean más rosados, agrega cal de jardín al suelo para que los niveles de nitrógeno estén altos y bajos niveles de fósforo. Esto debe hacerse mucho antes de la floración, es decir a finales de otoño o principios de primavera.
Algunos aficionados a la jardinería recomiendan la utilización de café molido en el suelo o vinagre en tu regadera para lograr hortensias más azules, ambos elementos hacen que la tierra sea más ácida, y permiten que las flores absorban el aluminio más fácilmente. También puedes probar con las cáscaras de frutas, los recortes de césped, la turba y las agujas de pino, que tienen un efecto muy similar. Y si quieres hortensias más rosadas, las cáscaras de huevo trituradas pueden ser una forma de conseguirlas fácilmente.