Durante el verano, principalmente en los días de mucho calor, optamos por prendas de color claro ya que las mismas resultan más frescas. Sin embargo la acumulación del sudor y en gran medida los ingredientes de los desodorantes, provocan la aparición de las incómodas manchas amarillas que a veces pueden arruinar prendas que realmente amamos.
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Pero a no desesperar porque al parecer existe una solución casi mágica para quitar de una vez y casi para siempre estas desagradables manchas amarillas de nuestra ropa. Te contamos cómo puedes preparar este líquido mágico de una forma simple y económica ya que incluye dos productos que generalmente tenemos en nuestras alacenas.
El quitamanchas mágico del que hablamos es una mezcla preparada con vinagre blanco y bicarbonato de sodio. Lo primero que debes hacer es mezclar ambos ingredientes hasta formar una pasta. En cuanto a las proporciones dependerá de la cantidad de ropa que quieras limpiar.
Una vez que hayas formado la pasta aplícala sobre cada una de las manchas amarillas, deja actuar la mezcla por unos minutos y luego introduce la prenda en un balde u olla con agua y vinagre. Las prendas deben permanecer en este balde por al menos 20 minutos, luego podrás escurrirlas y lavarlas a mano solo con agua.
Si no te agrada la idea de quitar estas manchas vinagre y el bicarbonato puedes optar por una mezcla a base de detergente para platos. Para ellos puedes mezclar unas gotas de detergente para limpiar la vajilla con unas cucharaditas de bicarbonato de sodio y agua y luego frotar esta mezcla sobre la mancha. Dejar actuar por un par de horas y pasado este tiempo, lavar las prendas en la lavadora o a mano.