La pasta en España se ha vuelto un plato muy consumido. Fundamentalmente por su facilidad para la preparación como por su economía y claro, su sabor. Sin embargo sucede que en muchas ocasiones cometemos errores en la manera en que debemos escurrirla para no quemarnos o derramar alimentos.
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Esta nota te va a dar un tip fundamental, porque seguramente nadie te enseñó a colar la pasta y si bien parecería ser un paso bastante simple, no lo es tanto, o mejor, es simple pero el sentido común no suele ser correcto en algunas formas relacionadas a cosas básicas de la cocina.
Sucede que en el ámbito de la cocina muchos conocimientos se traspasan de madres a hijos, pero en ocasiones dichos saberes se transmiten de manera errónea. Por eso hoy nos hemos propuesto enseñarte cómo colar la pasta de forma correcta. Entonces, ¿cómo colar de manera adecuada la pasta?
Las redes sociales muchas veces sirven para descubrir nuevos trucos y romper ciertas erróneas tradiciones con relación la gastronomía. Así es como desde varios perfiles está circulando desde hace varios días la forma correcta de colar la pasta, sin que el cocinero se queme. Lo más frecuente es que las personas que preparan este alimento coloquen el colador en el fregadero y viertan el contenido de la olla dentro, con el objetivo de que el agua de la cocción acabe en el desagüe y nos quede la pasta en el colador.
Si bien esta es la técnica más frecuente en la mayoría de los hogares, esto no quiere decir que sea la correcta. Los que preparan pasta con bastante frecuencia saben que cuando se lleva a cabo este tipo de acción existe la posibilidad de que una parte de lo cocinado caiga en el fregadero, consiguiendo que se pierda una buena cantidad del alimento. A ello se le une, además, que cuando se vierte el agua caliente de la olla siempre hay el riesgo de que nos acabe salpicando y generando algún tipo de problema en la piel, como pueden ser quemaduras.
Lo cierto es que el uso del colador resulta esencial para que no se produzcan estos contratiempos. Es por eso que es importante saber colocarlo correctamente. Habrá que ponerlo en el interior de la cacerola para derramar el agua que haya dentro. Al tener el colador de esta manera habrá menos posibilidades de que se desperdicien los alimentos y de que se padezca algún tipo de herida de consideración.
Pero también es preciso que se repare en otro aspecto fundamental. Y es en el líquido que sobra de hervir la pasta. No hay que tirarlo todo. Dejaremos una taza para aprovecharlo, ya que su elevado contenido en almidón puede servirnos a la hora de elaborar una salsa que echaremos a la pasta.