SALUD

Descubre 3 trucos infalibles para dormir bien cuando hace mucho calor

Las olas de calor hacen que las noches sean más largas y calurosas.

Consejos para dormir bien con el calor.Con estos consejos conseguirás conciliar el sueño en las olas de calor. Fuente: Pexels
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Las altas temperaturas y las recientes olas de calor, están haciendo que las noches sean sofocantes y que los termómetros lleguen a cifras desorbitadas, aún de madrugada. Todo ello provoca que las personas duerman peor y se dificulte mucho el sueño, llegando a tener episodios de insomnio.

Dormir es importante, sino se duerme bien el cuerpo se resiente y los días se hacen más largos a causa del cansancio. Siempre se puede recurrir a encender el aire acondicionado, pero en caso de no tenerlo en casa, hay que buscar alternativas para que las noches no sean tan tediosas. A continuación, tres trucos para intentar conciliar el sueño y dormir bien cuando hace calor.

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Cerrar todas las ventanas. Para dormir bien, la temperatura de la habitación no debe rebasar los 21ºC. Lo más fácil para mantener el hogar con un ambiente fresco cuando hace mucho calor es bajar las persianas por completo durante todo el día. Lo ideal es ventilar la casa por la mañana a primera hora y luego bajar las persianas al máximo, para aislar la casa para impedir que entre el calor del exterior. y subirlas hasta la mitad por la noche para dormir.

Sábanas con fibras naturales. La ropa de cama es importante a la hora de conciliar el sueño cuando hace calor. Conviene emplear ropa cómoda de algodón o algodón natural, ya que el algodón ayuda a la absorción en la traspiración y no causan sudoración excesiva. Además de que, en verano, apenas se usa la sábana superior, sólo la bajera. Hablando de sábanas, te recomendamos cambiarlas dos veces por semana y utilizar aquellas que sean de algodón, ya que transpiran mejor.

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Dormir de lado. La postura también es importante a la hora de dormir. Si se duerme de lado, tendremos menos parte del cuerpo sobre las sábanas, por lo que la sensación de calor será menor. Aunque eso sólo se puede controlar al principio de acostarse, una vez dormidos no hay forma de controlar qué postura adaptamos.