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La estricta dieta que hizo David Harbour para su papel en la cuarta temporada de Stranger Things

Los fans de Stranger Things quedaron anonadados con el cambio corporal de David Harbour.

David Harbour.Fuente: Producción Gastrolab
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A los 47 años, David Harbour se ha transformado en uno de los actores más reconocidos del momento. La cuarta temporada de Stranger Things ha sido todo un éxito y la serie se mantiene en el top 10 de lo más visto a nivel mundial en la plataforma de Netflix. El actor que también fue parte del elenco de la película de Marvel, Black Widow, en esta oportunidad ha experimentado un gran cambio corporal. 

Harbour perdió más de 30 kilos durante su proceso de entrenamiento arduo y de dieta estricta, al prepararse para interpretar nuevamente a Jim Hopper en la cuarta temporada de Stranger Things. El jefe de policía de Hawkins en el pueblo ficticio de Indiana, Estados Unidos, sorprendió a todos cuando se lo vio mucho más delgado y musculoso. Claro que su aspecto dentro del contexto de la historia denota los signos de un preso capturado por los “soviéticos”.

Fuente: Instagram @dkharbour

El actor estadounidense confesó para el medio British GQ que perdió alrededor de 36 kilos con su dieta y para eso se unió al plan de nutrición que tiene como estrategia principal el ayuno intermitente. Claro que lo hizo con asesoramiento de profesionales de la salud que atendieron sus condiciones energéticas y restricciones alimentarias.

Fuente: Instagram @dicas_filmeseseries

En declaraciones para dicho medio, David expresó que al estar trabajando en un nuevo proyecto en el cual interpreta a “Papá Noel” recuperó todo el peso que bajó y que no volvería a hacer dietas tan estrictas. "Tan solo se trata de no comer", confesó el artista de “Escuadrón Suicida”, al respecto de la ingesta de alimentos que llevó a cabo para el papel de Jim Hopper.

Si bien David Harbour perdió mucho peso y lo hizo con acompañamiento especializado para tales fines artísticos, no es bueno ejecutar dietas sin el asesoramiento profesional ni un estudio extenso de las condiciones del organismo, antes de comenzar a hacer rutinas de ejercicios tan intensos.