Los electrodomésticos son necesarios para la vida cotidiana pero nos dejan los bolsillos secos. Muchos de los artefactos que nos solucionan el día a día en casa, gastan una barbaridad pero se han vuelto tan indispensables que es muy complicado no usarlos.
Te podría interesar
Definitivamente, una forma de ahorrar en los gastos del diario es teniendo en casa electrodomésticos lo más eficientes posible. Y aunque a priori puedan ser algo más caros, la inversión se amortiza gracias al ahorro energético que suponen.
Entre los electrodomésticos que tienes en casa, sin dudas que el frigorífico es uno de los que más energía consumen y el consumo energético diario depende de su eficiencia. Así, el consumo entre los modelos menos eficientes y los que más lo son puede ser de hasta 500 kW más al día, algo que se refleja en la factura de la luz incrementándola hasta en un 20%. Más de 400 euros en una década. Le siguen la lavadora y la secadora en cuanto a mayor consumo.
Precisamente, por la importancia que los consumidores dan cada vez más dan este etiquetado en los electrodomésticos que menos consumen, el 1 de marzo del año pasado la UE actualizó la Etiqueta de Eficiencia Energética (EEE), creada hace más de 25 años, para aclarar las confusiones que generaba.
El sistema actual simplifica la escala anterior (elimina la A+++, A++ y A+) y establece exclusivamente letras de la A, que identifica a los aparatos más eficientes, a la G (los menos).La nueva etiqueta incluye también un código QR para que desde el smartphone podamos recibir información adicional sobre el electrodoméstico, como el nombre del fabricante o proveedor, el modelo con su número y la clasificación de consumo energético del mismo.