No es habitual ver las enormes extensiones de viñedos repletas de luces de velas. Sin embargo es la única alternativa que los vinicultores de Francia tienen para salvar su cosecha debido a las bajas temperaturas que este mes de abril está dejando en la zona. Este es un clásico método que tienen los productores de vino para intentar mitigar las heladas pero que no garantiza el éxito.
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Este mes de abril está siendo insulsamente frío para los vinicultores de Francia, que esta misma semana han protagonizado imágenes impresionantes en los campos de vid repletos de pequeñas candelas que buscaban desterrar las heladas. En la noche del pasado domingo la temperatura llegó a registrar los 9 bajo cero.
El sector del vino vive por segundo año consecutivo esta situación. El pasado 2021 en los viñedos de Francia se cosechó una de las producciones mas reducidas debido a los cambios bruscos de temperatura que hicieron elevar el termómetro en el mes de marzo hasta registros inusuales para la época del año y sufrieron importantes heladas durante abril.
Entre los recursos que encuentran los vinicultores están esas velas anteladas que se pueden apreciar en las fotografías que sirven para nivelar las temperaturas en los viñedos. Por otro lado, el gobierno de Francia ya ha anunciado que ayudará al sector del vino con diferentes medidas para proteger los viñedos.
Los enormes esfuerzos y preocupación de los vinicultores se evidenció este pasado fin de semana en la famosa zona de Chalbis, en la región de Borgoña. La madrugada del pasado domingo se alcanzó en Francia el récord de temperatura mínima en un mes de abril en más de 70 años. Por segundo año consecutivo los productores de vino se enfrentan a esta situación y esperan que las temperaturas se normalicen en los próximos días y así mejorar la cosecha del pasado año.