Esta semana se estrenó la décima temporada de MasterChef y el talent show de cocina más famoso de España presentó a los participantes que tuvieron que cocinar un primer plato para ser evaluado por el jurado, que está decidiendo quién formará parte de la competencia y quién se queda fuera.
Te podría interesar
Una de las participantes que llamó la atención en la primera instancia de prueba y quedó seleccionada para formar parte de los competidores de MasterChef 10, fue Patricia, una mujer de 32 años de Barcelona, que trabaja como administrativa pero tiene habilidad para la cocina y algunos conocimientos a la hora de ejecutar recetas y presentar platos.
Patricia se define como una “vampiresa” y su deseo de entrar a formar parte de la competencia de MasterChef viene desde sus aspiraciones por conocer nuevas técnicas y aprender todo del jurado con gran experiencia y trayectoria.
La participante de MasterChef ama la cultura coreana y uno de sus mayores deseos es poder abrir su restaurante de comida de España en Corea del Sur. “Siempre me ha gustado todo eso de los vampiros”, expresó para las cámaras del reality. Y dejó claro su apodo, al referirse al desafío que tuvo que enfrentar en su primer plato: “Mis amigos me llamaban ‘vampiresa’”. Además, la cocinera agregó: “Y la sangre tendría que dominarla. Pero, en este caso prefiero que me pongan unos ajos porque me gustan como huelen crudos y fritos”
Al cocinar con sangre, Patricia llamó a su plato “Nubes de mar” y fue, según su explicación, un híbrido entre albóndiga de rape con carabinero y buñuelo. Al consultarle por ingrediente de la comida asiática, la participante de MasterChef contestó que todavía no la domina pero tiene mucho interés en aprender. Además, mencionó que siente atracción por los hombres coreanos por su elegancia y pulcritud.