Aunque parece un término difícil de realizar, cocinar a baja temperatura tiene cada vez más adeptos y no es tan complicado según lo demuestran algunos consejos de importantes chefs. Entre esos accesorios que facilitan esa tarea están las ollas de cocción lenta o también conocidas como Crock Pot.
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Uno de los primeros accesorios que debemos tener es el denominado sous vide. Es un utensillo que nos permite cocinar con precisión de temperatura y tiempo. De esa manera los alimentos mantienen sus propios sabores. Son fabricados en aluminio y tienen un panel de control fácil de usar.
Otro de los elementos a tener en cuenta es una envasadora al vacío. En las bolsas adecuadas es un accesorio fundamental para la cocción a bajas temperaturas. Así evitamos que los alimentos tengan contacto con el aire y se produzcan bacterias que pueden arruinar nuestros ingredientes.
Las conocidas Crock Pot son ollas que son ideales para cocinar a baja temperatura. Están fabricadas en cerámica en color rojo y cuentan con dos niveles de potencia. Además traen una tapa de cristal que se puede usar en el lavavajillas. Su capacidad es de 3,5 litros.
El termómetro y el cortador de verduras también son accesorios para cocinar a baja temperatura. El primer nos ayuda a controlar la temperatura y es imprescindible para este tipo de cocción. El cortador o mandolina de acero inoxidable ya que un buen corte ayuda en el sabor y la textura de las verduras.