La guerra que está sufriendo Ucrania como consecuencia de la invasión rusa -que ha disparado el coste de los carburantes-, sumada a la huelga de transportistas y la previa inflación que España arrastraba se ha traducido en un duro golpe para el bolsillo de los consumidores. Alimentos como el pan, la carne, el pescado o la cerveza ya notan una importante subida de precios que al parecer, se mantendrá.
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Diversos expertos, asociaciones de consumidores y distribuidores coinciden en señalar señalan que, sumado al incremento del precio de los alimentos de la cesta básica, podría notarse cierta falta de stock de determinados productos de forma puntual. Debemos tener en cuenta que España tiene una fuerte relación comercial con Ucrania dado que este país es el primer proveedor extranjero de maíz y el cuarto de trigo.
En este sentido, diversos informes señalan que la guerra continuará elevando los costes de la energía y, en consecuencia de las materias primas y alimentos. En este punto recordamos que gran parte del consumo de cereales se dedica a la elaboración de los piensos base de la alimentación del ganado y que permite llenar de carne. las estanterías del supermercado.
En las próximas semanas, según explican los expertos, veremos como la cesta de la compra se sigue encareciendo, un alza de precios que se verá por ejemplo en alimentos derivados de la harina como el pan, la bollería. Del mismo modo, se incrementará el precio de la fabricación de malta y, por ende, de la cerveza.
La subida del precio de los alimentos podría ir de la mano de la escasez de ciertos productos. Los analistas recuerdan que las empresas del sector del gran consumo ya están realizando una gran labor de contención para no contribuir a la escalada de precios. No obstante, apuntan que la falta de productos será puntual.