El mal bebes y comes puede afectar a tu vejiga que es sin dudas un órgano muy importante en nuestro cuerpo. Hay muchas razones para tener en cuenta tu vejiga y su bienestar al planificar los menús de cada semana por eso, está muy atento a las dietas que te hablen en particular de estos temas.
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Una alimentación saludable y equilibrada nos hará no descuidar el mantenimiento de la vejiga ya que el no estar atentos a su cuidado puede provocar inflamación y enfermedades en la vejiga con el tiempo, así como algunos efectos secundarios más inmediatos y bastante molestos, como frecuencia urinaria y dolor pélvico, entre otros que puedan aparecer.
Cuando le agregamos a nuestro cuerpo alimentos ácidos como las bebidas con cafeína y el alcohol, tienden a causar irritación de la vejiga y por supuesto nos hará daño. Dentro de los síntomas de una vejiga irritada puede aparecer la urgencia, la frecuencia urinaria y una sensación de vaciado incompleto de la vejiga. Algunos alimentos que a menudo causan irritación urinaria son el café, el té negro, las comidas picantes, las frituras y los alimentos procesados, especialmente aquellos que contienen una gran cantidad de azúcar, sal y/o conservantes.
Todo lo contario que ayudará a nuestra vejiga son los alimentos que tienden a tener un alto contenido de agua, son más alcalinos que ácidos y contienen antioxidantes para reducir la inflamación en el cuerpo; las frutas y las verduras son un gran ejemplo de ello. Una buena regla general es incluir verduras de hoja verde o fruta fresca en tantas comidas y meriendas como sea posible, y llenar el plato para comer varias porciones al día.
Es decir, el cuerpo necesita agua para mantenerse hidratado. Beber mucha agua (y comer alimentos con un alto contenido de agua) también es clave para la salud urinaria y por ende, la vejiga. Beber de uno a dos litros de agua al día puede ayudar a diluir cualquier irritante en los alimentos o bebidas que se consumen.