Se sabe que la limpieza del pescado suele ser algo bastante compleja, por eso es que siempre la recomendación es que cada vez que quieras comer un producto de mar, la mejor opción es que le dejes la limpieza de las espinas y escamas a los pescaderos.Sin embargo si eso por alguna razón no sucediera, bueno es conocer algunos tips que te permitirán limpiar el producto, probablemente no como un profesional, pero al menos te podrás defenderte y disfrutar en este caso de un buen plato de lenguado.
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Para que te quede un lenguado fino y fileteado, lo primero que tienes que hacer es quitarle la piel a la pieza. Para ello lo más sencillo es mojar la cola del lenguado en agua caliente durante unos segundos y posteriormente tirar de la piel para arriba. El mismo procedimiento lo realizaremos de ambos lados.
Una vez que tengamos al pescado pelado, vamos a sacarle los lomos. Para ello cortaremos el lenguado justo a la mitad siguiendo la espina dorsal con el filo de un cuchillo hasta que queden ambas partes separadas. De esta manera, vamos metiendo el cuchillo poco a poco y tirando del lomo hacia a afuera. Cuando lleguemos a la parte externa, cortamos con el cuchillo y ya tenemos el primer lomo listo.
Repetimos la misma operación con el otro lomo del mismo lado, y una vez tengamos una parte arreglada, damos la vuelta al lenguado y sacamos los lomos de la otra parte de pescado. Con estos tips, lo que conseguimos es separar, por un lado los cuatro lomos del lenguado sin espinas y nos quedan listos para cocinar y por el otro la espina, que en lugar de tirarla la podemos utilizar para hacer un caldito con todo el sabor del pescado.