Es de público conocimiento que las mejores comidas son italianas, y es que a lo largo de su historia han ido perfeccionando su técnica hasta llegar a la excelencia. Lo mismo sucede con los panificados, son de gran calidad y algo tan simple como un pan con verduras y carne puede ser algo súper glorioso.
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Los ‘paninos’ o bocadillos en italiano son un manjar de primera división y se diferencia mucho de los bocadillos que preparamos aquí en España. Afortunadamente para nosotros los bocadillos de la península botilde están comenzando a extenderse por nuestras tierras para deleitar nuestros paladares.
Casabase, de Francesco Maggi, es una tienda de alimentos italianos ubicado en el barrio de Salamanca en Madrid y tiene grandes panificados, uno de sus panini más vendidos es ‘Vincent Vega’ que está hecho de una crujiente chapata rellena de lechuga, queso fontina, tomate seco, ‘finocchiona’ una longaniza toscana aromatizada con semillas de hinojo y pesto.
El dueño de Casabase afirma que “Para mí es importante que se noten todos los ingredientes del panino. ¿Sabes esas hamburguesas con un montón de cosas en las que todos los sabores se confunden? Pues un panino no es así, hay que equilibrar bien los ingredientes, hacer pruebas, cada panino es como una pequeña receta”.
La manera en que los paninos sean todo un éxito es que los pocos ingredientes, los tres o cuatro que usan y el pan que los contiene deben ser de calidad. Es muy común en la cultura gastronómica italiana que sus preparaciones sean así, pocos ingredientes pero de gran calidad. Podemos ver un ejemplo de esto en platos de pasta, pizzas o guisos diversos.