Al emplear cualquier tipo de cítrico, una vez que terminar de usarlo, lo primero que solemos hacer es desecharlo a la basura, debido a que tenemos la idea de que ya no sirve o no hay formas de emplear, la realizas es que la corteza de la naranja y otras frutas pueden ser usadas en múltiples recetas culinarias.
Pocos saben que la cáscara de naranja cuenta con propiedades para la salud poco conocidas, un ingrediente de cocina que podemos usar de diversas formas y que aporta muchos nutrientes. A continuación te contaremos para qué sirve la cáscara de naranja y cómo emplearla correctamente.
¿Cuáles son los beneficios de las cáscaras de naranja?
Los cítricos siempre se han destacado por su fuente importante de vitamina C, nutriente que el cuerpo requiere para la producción de colágeno, en ocasiones olvidamos que la corteza también aporta múltiples propiedades que pueden ser usadas a nuestro favor, contando con ciertos beneficios.
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La primera ventaja a considerar es su contenido en flavonoides, elemento que favorecerá el colesterol, disminuyendo la probabilidad de que en algún futuro podamos padecer algún tipo de problema cardiovascular.
Otra característica a considerar, es que tiene fibra, elemento que se recomienda su ingesta para la prevención de estreñimiento, facilitando nuestra evacuación y favoreciendo el proceso de digestión.
Por último, pero no menos importante, también cuenta con un aporte de vitamina A, nutriente que se destaca por ser fundamental en la visión, fortalece el sistema inmunológico y es beneficioso para tener una piel sana, 3 efectos positivos relevantes a considerar.
¿Cómo consumir la cáscara de naranja?
Para el consumo de la cáscara de naranja, es crucial conocer su correcta aplicación, puesto que su sabor puede ser muy amargo, haciendo que sea desagradable para el paladar. La primera opción consiste en rallar su corteza con un rallador de alimentos para obtener filamentos más delgados, evitando llegar a la sección blanquecina para que no amargue, ya sea que lo agregues a batidos, ensaladas o zumos.
Otra alternativa en la que podrás consumir la corteza naranja, es haciéndola en mermelada, de esta manera la quitaremos su sabor amargo y lo podremos aplicar a los hotcakes. Sigue unos sencillos pasos para lograrlo:
- Reúne 1 kilo de cáscara de naranja, con un cuchillo intenta retirar toda la parte blanca de la cáscara. En un cuenco con agua, lo dejamos remojar por 4 días, cada dos días cambiamos el líquido.
- Pasado el tiempo, en una olla con 1 litro de agua y un kilo de azúcar, creamos un almíbar, cuando tenga la consistencia espesa, añade la piel de naranja, dejamos reducir.
- Al tener una consistencia deseada, sacamos del fuego y agregamos el zumo de un limón.
- Dejamos enfriar para envasar y almacenar en la nevera.
La piel de naranja en confitura o mermelada, son buenas opciones para comerla, pero ten cuidado en su ingesta excesiva, puesto que sus niveles de azúcar podrían afectar tu salud. Ahora que ya conoces las propiedades de la cáscara de naranja, aplicadlos en tu dieta balanceada y aprovecha sus beneficios.