Los champiñones son de los hongos más hermosos y sabrosos que existen. Además su olor a tierra lo convierte en un alimento ideal para conseguir platos increríbles. Sin embargo, uno de los errores más comunes es lavarlos antes de cocinarlos, la realidad es que no necesitan un proceso de limpieza muy agresivo, basta con limpiarlos. Veréis, los hongos son similares a las esponjas, esto quiere decir que si los metemos en agua, la absorberán y a pesar de secarlos muy bien, en su interior seguirá el líquido. Es por eso que hoy queremos daros la técnica correcta para limpiar los champiñones.
Beneficios de los champiñones
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) de España, nos dice que los champiñones están compuestos principalmente por agua y carbohidratos, esto lo convierte en un alimento que no aporta mucha energía, sin embargo, destaca las siguientes bondades:
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Son una buena fuente de fibra, que proporciona sensación de saciedad, mejora el tránsito intestinal.
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Protege ante al cáncer de colon y enfermedades cardiovasculares.
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Su bajo contenido calórico convierte a los champiñones en un alimento muy útil en dietas hipocalóricas; es decir, con pocas calorías.
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También es rico en aminoácidos esenciales, en cuanto a vitaminas, destacan la niacina, roboflavina y un poco de vitamina C. En los minerales tiene cantidades benéficas de potasio, hierro, fósforo y selenio.
¿Cómo elegir los mejores champiñones?
El portal de Verleal, nos dice que en la actualidad se cultivan numerosas variedades de champiñones diferentes. Los hay rosados, ocres o silvestres; aunque los más populares son los de color blanco. Cuando vayáis a comprarlos hay que tener en cuenta su frescura y lo mejor es seleccionarlos manualmente, siempre que sea posible. A simple vista, hay que escoger champiñones de aspecto blanco y tacto compacto y duro con un sombrero cerrado y muy unido al pie. Por otro lado, los champiñones frescos se conservan en buenas condiciones durante muy poco tiempo, ya que a los pocos días de haberlos comprado empiezan a adquirir un color más marrón y a perder sus propiedades. Para evitar que esto ocurra hay que comprarlos congelados o meterlos al congelador después de limpiarlos.
¿Cómo limpiar los champiñones correctamente?
- Con un chuchillo, corta la parte del tallo del champiñón que tiene tierra.
- Con el mismo utensilio, quita con cuidado la piel del "sombrero" del hongo (como si pelaras un plátano).
¡Y listo! Eso es todo lo que tenéis que hacer para dejar los champiñones limpiecitos y listos para comer. Sabemos que la técnica puede ser un poco mañosa, pero veréis que pronto lo pilláis, esto se trata de práctica y más práctica todavía. Si no os acomodáis con el cuchillo, entonces probad con un pelapapas, el procedimiento es el mismo. Recordad que lavar los champiñones con agua no les permitirá tener un buen color ni tampoco una consistencia crujiente. Además si después de lavarlos, los guardáis en la nevera, terminarán por perder su forma y sabor.