Si eres de los que se pasan las medicinas con el café de la mañana, esto te puede interesar, pues quizás no deba seguir haciéndolo, ya que podría suponer un riesgo para tu salud. Aquí te contamos lo que dice la ciencia al respecto.
¿Por qué no debes tomar café con tus medicamentos?
Las rutinas matutinas suelen ser un poco apresuradas, y para muchos, lograrla sería imposible sin un a buena taza de cafe. Pero si te enfermas y tienes que tomar medicamento, tal vez deberías hacer una excepción, pues juntar el café con los medicamentos puede ser peligroso, ya que esta bebida podría interferir con la absorción del medicamento.
Cabe recordar que las bebidas con cafeína estimulan el sistema nervioso central. Por lo tanto, si desea lograr un efecto sedante o analgésico, la cafeína puede interferir, contrarrestar o anular el efecto del medicamento, pero esto variará de un caso a otro, así que más vale leer las indicaciones en la etiqueta.
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¿Qué pasa si combinas medicamentos con cafeína?
La cafeína es un estimulante que actúa sobre el sistema nervioso y tiene diferentes efectos en diferentes personas, provocando rechazo y ansiedad en algunos, mientras revitaliza el cuerpo y aumenta la concentración y el estado de alerta en otros. Esto puede afectar negativamente la absorción de las sustancias activas. Si el problema está en el hígado, los trastornos pueden hacer que la droga se acumule en el cuerpo. Este es un problema para ciertos tipos de tratamiento, ya que las concentraciones más altas pueden suponer un riesgo para los pacientes con esquizofrenia, por ejemplo.
El café con leche tampoco es una opción, ya que la leche también puede interferir en la absorción de algunos grupos de fármacos, como las tetraciclinas.
Además, la combinación de estas sustancias puede potenciar, debilitar o inhibir los efectos del medicamento, por lo que es recomendable tomarlas a primera hora de la mañana con el estómago vacío, aunque esto no aplica en todos los casos. De todos modos, lo mejor es siempre seguir las indicaciones del médico.
Ahora que sabes por qué no debes tomar café con tus medicamentos, parece que el café de la mañana tendrá que esperar un poco. Lo mejor es tomar el medicamento con agua simple después o antes del desayuno. Más tarde podrás disfrutar del ansiado café y comenzar el día como es debido.