El frío suele afectar a nuestros pies, mucho más de lo que pensamos, así generando problemas de pies secos y agrietados, entre otras razones. Esto sucede en gran parte por el cambio de clima, transpiración o un mal calzado. Es por eso que cuidar esta parte de nuestro cuerpo es esencial para llevar a cabo nuestro día. De acuerdo con ‘Mayoclinic.org’, explica que, si no se tiene cuidado los pies agrietados, con el paso del tiempo se tienden a desarrollar fisuras más profundas, las cuales pueden aumentar el riesgo de infección. Los problemas con esta extremidad del cuerpo puede observarse en los talones de nuestros pies, donde suele ser la zona más afectada.
¿Por qué tengo los pies secos?
Esta afección se suele ocasionar debido a que, a comparación de nuestra cara, la piel de nuestros pies es más gruesa y densa y es una zona que está sometida a la fricción del piso. Una de las principales causas del problema de pies secos y agrietados se debe a una falta de hidratación en los mismos. En consecuencia, de descuidar esta parte de nuestro cuerpo, la piel comienza a descamarse y hay cambios de coloración a tonos rojos y también se logra sentir un picor en la zona más afectada.
Una causa más de este problema puede ser el calzado que estamos usando. Especialmente los pies secos y agrietados suelen aparecer en pacientes con enfermedades relacionadas al metabolismo, como lo pueden ser aquellos que sufren de diabetes.
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¿Se puede tratar problemas de pies secos con bicarbonato?
Existen múltiples alternativas medicinales para tratar la afección de la extremidad. Sin embargo, hay una que destaca por su sencillez a la hora del tratamiento y el único ingrediente que necesitas es bicarbonato de sodio. De acuerdo con el medio especializado, Medical News Today señala que el bicarbonato puede regenerar los tejidos del talón.
Una forma sencilla de hacer una mezcla para el tratamiento de pies secos es poniendo media taza de bicarbonato en un recipiente (al tamaño de tus pies) con agua tibia. Deberás remojar los pies por alrededor de 20 minutos dos veces al día. Evita enjuagar los pies para que el bicarbonato haga su magia. Recuerda consultar con un profesional de la salud antes de intentar este remedio casero