Los problemas gastrointestinales son de las afectaciones más comunes entre cientos de personas alrededor del mundo, dado que en una sociedad como la nuestra cada vez es más difícil encontrar opciones saludables con las que podamos nutrir nuestro cuerpo. Por lo que constantemente caemos en las trampas publicitarias y consumimos alimentos procesados que no hacen más que engordarnos, debilitar nuestra salud e inclusive detonar otro tipo de problemas.
Cómo el reflujo, una condición que se caracteriza por una sensación de ardor que va sumiéndose por el estómago hasta llegar a la garganta y pese, aunque en primera instancia no respetes está un gran riesgo, a medida que no se trata puede ir escalando hasta causar heridas internas o tumores.
Así que no pongas en riesgo tu bienestar y opta por alguna de las siguientes opciones de alimentos que combaten el reflujo.
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Remedios caseros para el reflujo
1) Avena
La avena es una excelente opción para iniciar el día o consumir de forma esporádica en el día para aliviar el hambre, pues su alto contenido de fibra te dará una confortable sensación de saciedad, a la par que combate la acidez estomacal gracias a sus propiedades que cuidan la flora intestinal y mejorarán los procesos digestivos.
2) Aceites vegetales
Otro magnífico opción para proteger nuestro sistema digestivo ante el reflujo, son los aceites vegetales comestibles, pues estos forman una capa (parecida a la mucosa) que recubre el interior del cuerpo, facilitando la ingesta de alimentos, mientras reduce los síntomas del reflujo.
3) Clara de huevo
Finalmente, terminamos la lista con las claras de huevo, una opción perfecta para dotar a nuestro organismo de proteínas y energía a cambio de una mínima porción de calorías. Sin mencionar que su alto contenido en fibra absorbe el ácido estomacal, combatiendo el flujo de manera natural.
Con esto llegamos al final de la nota de hoy, ahora que conoces cómo combatir el reflujo con el poder de estos tres superalimentos, es momento de aliviar tu cuerpo. Pero eso sí, no te olvides de consultar con tu médico de cabecera al respecto.