El ácido alfa lipoico es conocido por ser "el antioxidante de los antioxidantes", una molécula esencial para el correcto funcionamiento de determinas enzimas. Antioxidantes como este sirven para contrarrestar el efecto que los radicales libres u otros compuestos -como por ejemplo los rayos ultravioletas, pesticidas, productos químicos o el humo del tabaco- provocan en el cuerpo. Descubre cómo puedes incorporar el ácido alfa lipoico a tu dieta.
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Los antioxidantes más "famosos" son las vitaminas C y E. Como sabemos, estos compuestos se producen a través de la actividad de las propias células o bien a través de la dieta, de los alimentos que ingerimos. Si bien el ácido alfa lipoico se genera de forma natural por el organismo, podemos incorporarlo a través de la alimentación aunque lo cierto es que su absorción no es tan efectiva como en el caso de suplementos nutricionales.
El ácido alfa lipoico (ALA por sus siglas en inglés), junto a otros antioxidantes, sirve para reducir el riesgo de determinadas enfermedades que afectan a la visión o afecciones como el alzhéimer y la diabetes. Como decíamos se encuentra en determinados alimentos vegetales y animales. Sin embargo, al estar ligado a las proteínas, las enzimas digestivas no pueden romper la unión con el aminoácido y el cuerpo no puede aprovechar completamente sus beneficios.
En este sentido, si el ácido alfa lipoico se consume en forma de suplemento sus efectos serán más provechosos. Con todo, en la dieta, los principales alimentos que contienen este antioxidante son: la remolacha, la zanahoria, el tomate, la carne roja, las vísceras, las espinacas, el brócoli, entre otros. El cuanto al suplemento, está disponible cápsulas o inyección, aunque los expertos siempre aconsejan consultar con un profesional o nutricionista antes de incorporarlo.
Entre los muchos beneficios del ácido alfa lipoico podemos citar su capacidad de metabolizar los carbohidratos y optimizar la energía; controlar el azúcar en sangre en los pacientes con diabetes de tipo 2; prevenir el envejecimiento de las células y favorecer la salud ocular, especialmente en personas con edad avanzada.