Sabemos que la incorporación de las frutas en nuestra dieta es correcto y beneficioso. Sin embargo, no siempre sabemos qué grupo de este tipo de alimentos debemos consumir en cada momento del día y cómo afecta a nuestro organismo. Descubre cuáles puedes ingerir por la noche para no padecer efectos negativos.
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Los especialistas en nutrición distinguen entre solo cenar frutas por la noche o tomarla como postre en la última comida del día. Cuando se ingiere de forma individual suele digerirse con facilidad y conviene tomarla unas horas antes de irse a la cama, ya que al pasar poco tiempo en el estómago, el organismos no llega a consumir las calorías y los azúcares se transforman en grasas.
Las actividades habituales antes de acostarnos serán suficientes para quemar esa energía ingerida en las frutas por la noche. Por otro lado, si se considera este tipo de alimentos como postre no debería comerse tras el plato pincela o minutos antes de ir a cama. Las frutas, como hemos mencionado antes, se digieren de forma más veloz y, en los casos de cenas más copiosas en las que el proceso digestivo se ralentiza, la frutas pasan más tiempo del correspondiente en el estómago y producir malestar e inflamación.
Pese a estas consideraciones jamás debemos prescindir de las frutas en nuestra dieta, ya que aportan notables beneficios y nutrientes esenciales a nuestro organismo. Tan solo tenemos que tener en cuenta que conviene optar por aquellas con un índice glucémico más bajo y, por tanto menos dulces, como por ejemplos los plátanos. También debemos prescindir por la noche de las más maduras, ya que la fructosa suele concentrarse y aportan más calorías.
Tras conocer todos estos detallas, te estás preguntando cuáles son las frutas que debes tomar por la noche la respuesta está en las menos dulces como por ejemplo los llamado frutos rojos. Así, algunas ideales para tu dieta durante las últimas horas del día serían los fresones, arándanos, frambuesas o moras.