Hacer deporte en la mañana es un hábito saludable muy aconsejable para todo especialista. Las personas que realizan ejercicio de forma regular lo hacen para mejorar su condición física y su salud, algo más necesario que nunca en este 2022 luego del sedentarismo forzado en el que la pandemia ha afectado también a nuestra salud mental.
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De todas formas, existen variables que no suelen ser valoradas pero que también condicionan los efectos del ejercicio. Una de las más olvidadas es la elección de las mejores horas del día para llevar a cabo la actividad física y cual será el desayuno que debemos consumir antes y después del deporte.
Según los expertos, una de las variables que más puede condicionar el efecto de hace deportes, es la calidad del aire que se respira durante el ejercicio. A este respecto hay que recordar que los organismos internacionales advierten de la presencia de altos niveles de contaminación en el aire que respiramos. Por esta razón es muy importante elegir el momento del día y el lugar en el que las condiciones ambientales sean las más favorables.
Otra de las cuestiones que suelen generar dudas cuando hacemos un deporte, es si se debe hacer el ejercicio antes o después de desayunar. Es evidente que no es adecuado realizar actividad física de alta intensidad inmediatamente después de las comidas principales, especialmente si la ingesta de comida ha sido copiosa, aunque sí que sería recomendable una actividad física muy ligera, como un paseo.
Por eso, lo recomendable es que la persona que va a realizar deportes tenga una comida ligera (una pieza de fruta, un yogur, una infusión, frutos secos) aproximadamente 30 minutos antes de la sesión de entrenamiento. Con esta medida, nos sentiremos con más energía y motivación para entrenar más intensamente, durante más tiempo y, también, con una menor sensación de hambre posterior al ejercicio que disminuirá la tentación de comer en exceso.