¿Quieres reforzar el sistema inmunológico, pero ya no quieres saber nada del zumo de naranja? Entonces tienes que echarle un ojo a este plato de cuchara japonés. Seguramente, has escuchado que la dieta oriental es una de las más saludables y las que esconden el secreto de una vida larga, así que, si quieres aprender a incorporar estos productos en tu alimentación, te invitamos a seguir leyendo.
En esta ocasión, estamos hablando de la sopa de miso, un plato de cuchara de origen japonés que tiene múltiples beneficios para nuestro organismo. Además de darte la receta, te diremos cuáles son sus beneficios y contraindicaciones. Pero ¡Ojo! Debemos avisarte que este plato será un desafío a tu paladar, esto se debe a que se elabora con natto (judías de soja fermentadas), y este es considerado como uno de los alimentos que peor huelen en el mundo.
¿Cómo hacer sopa de miso?
Ingredientes
- 3 cucharadas de miso
- 1 litro de agua/ Caldo dashi
- 15 gramos de alga wakame deshidratada
- 200 gramos de tofu
- 50 gramos de cebolleta
- 50 gramos de puerro
- Fideos soba (Opcional)
Procedimiento
- Comienza hirviendo el agua en una cacerola. Una vez lista, saca un poco de líquido y resérvalo en un vaso.
- Enseguida, agrega el alga deshidratada y déjala cocer por 5 minutos, posteriormente, añade el tofu previamente cortado en daditos de 1 cm aproximadamente. Repite el procedimiento con el puerro y la cebolleta picada en cubitos. Deja cocinar por 5 minutos más.
- Disuelve el miso en el agua que reservaste en el vaso y pasados los 5 minutos de cocción de la sopa, agrega el miso.
- Para incorporar los fideos soba, sigue las instrucciones del fabricante para cocinarlos, una vez listos, agrega unos cuantos al cuenco donde servirás la sopa ¡Y a comer!
¿Qué propiedades tiene la sopa de miso?
El medio informativo, La Vanguardia, nos dice que este esta sopa japonesa aporta importantes beneficios a nuestra salud, esto se debe a que su elaboración con judías de soja fermentadas actúa como estimulante del sistema inmunológico. Otra de sus propiedades es que regula la tensión arterial, controla los niveles de colesterol y a nivel intestinal, nos permite mejorar los procesos digestivos e incluso combate las infecciones gracias a su contenido en probióticos.
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Contraindicaciones de la sopa de miso
Contrario a lo que podemos pensar, este plato japonés contiene niveles de sodio considerables, por lo tanto, los pacientes hipertensos no deberían comerla. Otro grupo poblacional que debería abstenerse de este plato de cuchara son los que sufren de retención de líquidos y los que tienen problemas renales, por otro lado, Mundo Deportivo desaconseja su consumo para personas con problemas de tiroides. Sigue en Gastrolab España para encontrar más recetas que refuerzan el sistema inmunológico en adultos.