Las patatas fritas son una de las opciones más rápidas para el picoteo y también para acompañar algunas carnes. Pero para varias personas esta combinación de hidratos de carbono, aceite y sal, consumida aisladamente o con frecuencia, puede ser perjudicial para la salud.
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Para disfrutar el sabor de las patatas como si fueran fritas existe una forma de prepararlas en casa y disfrutarlas de forma más saludable. El procedimiento que se le hace a este alimento da como resultado la textura crujiente característica que suele darle la fritura en aceite. Este tipo de proceso y cocción puede hacerse también con batatas y las combinaciones de especias son infinitas y a gusto personal.
Para preparar unas deliciosas “patatas fritas” sin frituras y con la cocción en el horno, primero hay que lavar bien y pelar las patatas, y cortarlas en bastones de entre 2 y 2,5 centímetros de grosor. El paso siguiente es dejar estos trozos unos 5 minutos en agua helada, para luego escurrir y secar bien con papel de cocina.
Lo que se debe hacer en la etapa siguiente para preparar estas patatas, es colocarlas en una bandeja para horno, agregarles sal (se puede evitar y realzar el sabor con otros ingredientes), especias a gusto (pimentón, orégano, perejil, ajo o ají, entre otras más), pimienta y regarlas con un poco de aceite. El artefacto debe precalentarse previamente y luego hay que dejarlo en 180°C para cocinar los bastones durante no más de 25 minutos.
También existe una variante de este tipo de cocción sin frituras en donde las patatas se deben remojar pero en agua caliente y menos tiempo. Luego de escurrirlas y secarlas se tienen que llevar a horno por más tiempo, aproximadamente 40 o 45 minutos, y se pueden cubrir por encima con papel aluminio.