Los limones son un cítrico muy utilizado en la cocina por miles de razones y para muchas recetas. Además de aportar sabor y acidez a nuestros platillos, nivelando sus sabores a la perfección, son ricos en propiedades beneficiosas para nuestro cuerpo. Contienen vitamina C, un poderoso antioxidante que ayudan a proteger las células del cuerpo del daño.
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Además, son una fuente de compuestos vegetales con efectos antiinflamatorios. Esta fruta, con su icónico sabor ácido, se puede emplear en ensaladas, salteados, condimentos para carnes y hasta jugos y licuados. De esta forma, los limones en conserva te permitirán contar con este ingrediente todo el año y les aportarán un sabor increíble a tus platillos.
Ingredientes:
- 10 limones
- Sal marina c/n
- 1 cucharada de curry
- 10 granos de pimienta negra
- Cardamomo a gusto
Paso a paso:
Lavamos bien los limones y los cortamos en cuatro partes, sin llevar hasta el final. Se formará una especie de flor.
Agregamos abundante sal por cada una de las ranuras y los vamos colocando dentro de un frasco de vidrio. Es importante que el frasco sea grande, de vidrio y esté bien limpio.
Antes de agregar el último limón, incorporamos dentro del frasco la pimienta, el curry y el cardamomo. Puedes agregar otras especias que sean de tu agrado, pero con esto estará perfecto.
Agregamos el último limón y luego cubrimos por completo el frasco con más sal marina hasta que estén los limones completamente tapados de sal. Cubrimos la tapa del frasco con papel film y luego con la tapa correspondiente.
Envolvemos el frasco con un repasador o toalla. Dejaremos macerar los limones de 30 a 45 días en un lugar oscuro, con una temperatura más bien fresca, de entre 15 y 20°. Incluso podemos colocarlo dentro de la heladera si estamos en una zona donde hace calor.
Las primeras dos semanas, conservaremos el frasco tal cual está. A la tercera semana lo voltearemos con la tapa hacia abajo y en la cuarta agregaremos agua hasta que el frasco se llene y tapamos de la misma forma.
A esta altura, los limones ya estarán tiernos, humectados y listos para agregar a cualquier platillo: ensaladas, carnes o lo que más prefieras.