SALUD

Sin harina: así puedes preparar un delicioso crumble de manzana para tus desayunos

Con la llegada de los días más cálidos, empezamos a preparar comidas que no nos haga aumentar de peso y por supuesto que sea saludable. Te dejamos esta deliciosa comida de manzana que vas a disfrutar antes de comenzar el ritual de todos los días.

crumble de manzana sin harina.Fuente: Pexels.
Escrito en RECETAS el

Recetas de desayunos saludables, te van a ofrecer una cantidad enorme. Lo que debes buscar y tener ese ojo clínico, es en ver que no te vaya a engordar y que te de la energía necesaria para comenzar el día.

Ahora te vamos a dejar una receta sin harina que te va a enamorar. Es el crumble de manzana, un postre tradicional inglés que se realiza a base de fruta, harina, mantequilla y azúcar. Sin embargo, podemos disfrutar del crumble de una forma más san gracias a esta versión con maíz. Tiempo de preparación: 35 minutos. 

crumble de manzana sin harina. Fuente: Pexels. 

La preparación de esta receta sin harina comienza así: Lava y seca una de las manzanas y pásala por el rallador grueso. Luego, añade unas gotas de limón para evitar que la manzana se oscurezca. A continuación, haz un corte longitudinal a la vaina de vainilla y saca las semillas de su interior con cuidado. Calienta una sartén a fuego lento con dos cucharadas de azúcar. Agrega una cucharada de aceite de girasol, una pizca de canela y las semillas de la vainilla. Cuando el azúcar empiece a caramelizar, agrega la manzana rallada y rehoga todo unos 4 o 5 minutos.

Para continuar con esta receta sin harina de este crumble, pela y trocea las tres manzanas restantes y añádelas a la sartén junto con la ralladura de de limón. Rehoga un par de minutos más, apaga el fuego y reserva. Precalienta el horno a 180º en un bol grande, mezcla la harina de maíz, el resto del aceite de girasol, los copos de avena o de maíz hasta conseguir una mezcla homogénea.

crumble de manzana sin harina. Fuente: Pexels.

Para finalizar esta receta sin harina, coloca la manzana rehogada que has reservado en un recipiente apto para horno y reparte por encima la masa seca. Para terminar, hornea unos 30 o 40 minutos a 180º, hasta que la superficie presente un aspecto dorado.