Una delicia, prepara esta exquisita y original pizza rellena, no puedes dejar de hacer esta receta mejorada de la pizza tradicional. La pizza es una de las recetas italianas más famosas del mundo. Junto con la pasta, la cultura gastronómica del país europeo yace con esta preparación que tiene tantas versiones como personas en el mundo. Existen miles de formas de hacer pizza casera, aunque hoy te enseñaremos una versión mejorada sólo apta para los verdaderos amantes de esta preparación.
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Hoy te enseñaremos a hacer una sabrosa pizza rellena de jamón y queso, aunque también podríamos reemplazar estos ingredientes por otros como por ejemplo cebolla. Lo importante aquí es que no dejes de probar esta receta porque te aseguro que se volverá una de tus preferidas.
Ingredientes:
- 400gr de harina común todo uso
- 20gr de levadura fresca
- 40ml de aceite
- 280ml de agua tibia
- 100gr de queso en fetas
- 100gr de jamón cocido en fetas
- Salsa de tomate c/n
- 200gr de mozzarella
- Opcional: Hojas de albahaca y tomates cherry
Paso a paso:
En un recipiente colocamos la levadura junto con el agua tibia y opcional una cucharadita de azúcar, ésta ayudará a que la masa leude más rápido. Mezclamos hasta integrar. En otro bol colocamos la harina y dos cucharaditas de sal y mezclamos. Hacemos una corona en el medio y colocamos el aceite y 1/3 del agua. Vamos integrando la harina y agregando el agua en partes hasta formar una masa homogénea. Dividimos el bollo en dos partes y los dejamos leudar en un lugar cálido tapados hasta que dupliquen su tamaño. Pasado este tiempo, en un molde para pizza aceitado estiramos la primera masa. Encima colocamos el queso y el jamón feteados, dejando libres las orillas de la masa. El otro bollo de masa lo estiramos y con él cubrimos el anterior, haciendo una especie de sándwich con ambas masas. Apretamos bien en los bordes para cerrar y que el relleno quede dentro. Preparamos la salsa de tomate condimentándola con sal, orégano, ají molido y un poco de aceite de oliva. Colocamos sobre la masa y la llevamos al horno precalentado a 180° hasta que la masa esté cocida, pero aún blanca. Le agregamos el queso mozzarella por encima y llevamos al horno de nuevo hasta que gratine y la pizza tome un color dorado. Terminamos colocando un poco de aceite de oliva junto con unas hojas de albahaca y unos tomates cherry encima. ¡Y a comer!