Disfrutar las torrijas en Cuaresma y Semana Santa es algo propio de la cultura gastronómica de España, de las tradiciones y cultura general del país. El acabado de este postre puede quedar a gusto personal, hay quienes no prefieren el almíbar y solo rebozan con azúcar al final.
Te podría interesar
Pero para quienes prefieren disfrutar las torrijas con un acabado en almíbar, hay una serie de pasos a seguir para lograr el mejor néctar para este postre. Hay distintas formas de lograrlo, pues cada familia tiene sus secretillos en la receta, pero la manera más difundida es la que tiene de ingredientes a la miel, agua y un aromatizante.
En cuanto a los aromatizantes que pueden emplearse para elaborar el almíbar de las torrijas, puede optarse por las cáscaras de los cítricos, canela, cardamomo o vainilla. También puede agregarse algún licor. Pero puede pasar que guste más el almíbar clásico de miel y agua, agregándole solo azúcar.
Para obtener un digno almíbar casero para las torrijas, se deben colocar los ingredientes en un cazo para que se reduzcan, siempre a fuego bajo. Se puede optar por cualquier tipo de miel, de eucalipto, romero o milflores. La cantidad sugerida para realizarlo sería 100 gramos de miel, 100 ml de agua y dos cucharadas de licor, vino, ron, anís u otro a elección.
La mezcla de este almíbar para las torrijas tiene que llegar al punto de ebullición y luego dejar que siga al fuego pero todavía más bajo, durante 10 o 15 minutos. De esta forma el líquido logrará una correcta reducción. A continuación, es importante dejar enfriar el almíbar para ver el punto de densidad logrado y luego esparcir por encima de las torrijas. Finalmente, solo quedará disfrutar este postre tan característico de la fecha.