El sarro en los artefactos de cocina están muy relacionados al uso que se le da como también, al que están mal higienizados. Este sedimento aparece cuando el agua, que es muy dura o contiene muchos minerales pesados, es hervida y luego se enfría en el mismo lugar. El contar con sarro, está directamente asociada a mala salud.
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Donde más se da el sarro difícil es en el hervidor ya que esta capa blanca y dura recubre las paredes y estructuras del artefacto. Esta cambia el sabor del agua y además influye en su función. Esto es especialmente notorio en los hervidores que tienen la resistencia, estructura que permite que se caliente el agua, a la vista.
"Si se cubre completamente de sarro, la transferencia de la temperatura hacia el agua será menor, es como ponerle un chaleco. Va a causar que se sobrecaliente y se queme", explicó a LUN Diego Sierra, doctor en Química y profesor del Instituto de Química y Bioquímica de la U. de Valparaíso de la República de Chile.
Además del lavado del hervidor, otra forma de evitar el sedimento es ocupar agua filtrada, ya sea embotellada o con un filtro que ayude a capturar el calcio y otros compuestos, lo que ayudará a evitar que se forme la costra blanca en las paredes del artefacto. El usar agua segura, ayuda a que no se contamine el artefacto.
Por último, si ya se te olvidó utilizar el agua filtrada y quedó líquido en el electrodoméstico, puedes colocarla en otro recipiente o un termo, para que se mantenga caliente y la puedas volver a utilizar. Esto evitará que se decanten los minerales que forman el sarro y que se peguen en las paredes del hervidor.