Las bebidas alcohólicas son descartadas en toda dieta que quiere resultados inmediatos y saludables. Su graduación alcohólica y proceso de elaboración, las hacen muy perjudicial para el organismo como también, hacen que las grasas se fijen y por lo tanto no puedas bajar de peso.
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Decir que una bebida alcohólica es más sana que otras no significa que sea igual de saludable que una pieza de fruta o una ración de verduras, por ejemplo. Siempre será mejor ingerir agua, zumos y licuados que algo que contenga alcohol. Lo que sí, en el abanico de estas bebidas encontramos algunas que contienen propiedades que, si no la tomas en exceso, tiene algunos beneficios.
De las bebidas alcohólicas las más saludables en el mercado, el vino tinto es la ganadora. Los antioxidantes que contiene son buenos para cuidar el sistema circulatorio, sus componentes reducen el riesgo de padecer cáncer de pulmón y enfermedades degenerativas como el Alzheimer. En el caso del vino blanco, su principal beneficio es que contribuye a la eliminación de bacterias que provocan el empeoramiento de los dientes y la garganta.
En el caso de la cerveza negra es la más saludable de todos los tipos que existen, sobre todo porque, debido a su composición, puede prevenir la formación de coágulos de sangre, y así reducir el riesgo de padecer un ataque al corazón. Además, cualquier cerveza es una fuente de silicona que contribuye al crecimiento y al buen desarrollo de los huesos.
También, dentro de las bebidas alcohólicas encontramos los licores se destacan algunos destilados como la ginebra, cuyo sabor se obtiene de las bayas de enebro, tienen propiedades diuréticas que pueden reducir los niveles de azúcar en sangre. El whisky, tomado en pequeñas cantidades, genera beneficios antioxidantes similares a la toma de la dosis recomendada de vitamina C. Lo mismo sucede con un chupito de brandy.