Es un hecho científico, el té, sobre todo el té verde, es uno de los alimentos más sanos del mundo. Su composición, que consta de antioxidantes y otros nutrientes que impactan positivamente en nuestro organismo, como por ejemplo, en el cerebro. Si estás leyendo esto, es porque posiblemente tengas dudas sobre si empezar a tomar té, sea del tipo que sea.
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A continuación, te voy a contar 3 increíbles beneficios que te ayudarán a tomar la decisión correcta.
Los tres grandes beneficios que obtienes al tomar té
El té es un gran defensor del sistema inmunológico
Así es, cuando hablamos de consumir té, no lo hacemos pensando en perder peso, que también. El objetivo principal del té es ayudarnos a tener una mejor salud, en todos los sentidos. En este aspecto, está demostrado que consumir té ayuda contra el daño celular. Además de esto, los flavonoides y la vitamina H ayudan a generar defensas en nuestro cuerpo con una calidad superior, evitando que enfermemos tanto.
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El té, tu aliado perfecto contra la anemia
Si eres de esas personas con el hierro bajo, tomar té te podría beneficiar enormemente, ya que el té proporciona grandes cantidades de hierra, y ayuda a combatir las anemias, que en su mayoría, son un excesivo déficit de este.
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No tiene calorías
Así es, tomar té no engorda, y de hecho, en algunos casos es termogénico, eso significa que ayuda con la quema de grasas de tu cuerpo, aunque de forma orgánica, que lo tomes, no te hará adelgazar, pero con una buena alimentación y rutina de ejercicios, el té es un aliado perfecto para la pérdida de peso.
¿Cuál es el mejor té de todos?
El té está genial en cualquier de sus versiones, pero el más popular y el que más se ha estudiado, es sin lugar a dudas el té verde. Se ha demostrado que el té verde previene algunos tipos de cáncer, que además es un aliado crucial para la regeneración celular correcta de nuestro cuerpo.
También es un regulador natural, ayudando a regular la presión arterial y el azúcar en sangre, por lo tanto, consumirlo es una elección ganadora, siempre.