En una ocasión tuve la oportunidad de asistir a una experiencia, donde antes de iniciar el desayuno, realizaban una pequeña meditación, momento en el que debíamos desconectarnos del bullicioso de la ciudad para concentrarnos en nuestra respiración y pensamiento. Al terminar el evento nos regalaron un pequeño ramo de lavanda con palo santo. La madera de palo santo, además de tener un exquisito aroma, tiene propiedades que podemos aplicar para atraer la abundancia, por eso hoy te explicaremos cómo se usa el palo santo.
¿Qué es el palo santo y para qué sirve?
El palo santo se obtiene de un tronco del árbol Bursera que crece de zonas secas en especial, dentro de sus principales funciones es la limpieza energética de los espacios, incluso puedes pasarlo por tu cuerpo para desprender alguna envidia o malas vibras adheridas, así lo mencionan en Mizada. Por otra parte, en el canal de El Grimorio, resaltan que puedes usarlo como amuletos de protección, ya sea que los ubiques en alguna mesa, debajo de la almohada o lleves una pieza en tu bolsillo, al quemarlo puedes usar el humo para limpiar o potenciar a los amuletos.
¿Cómo se usa el palo santo?
Paso 1:
Ubícate en la entrada de tu hogar, enciende el palo santo, cuando comience a salir humo, lo pasaremos por toda la casa, haciendo énfasis en las habitaciones vacías, esquinas o con energía pesada, procura que las ventanas estén cerradas.
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Paso 2:
Deja que se queme sobre un recipiente, permite que se consuma, mantén todo cerrado por dos horas, permitiendo que el humo se absorba y llegue a todos los rincones del hogar, así lo mencionan en el canal de YouTube @TuHogarFengShui. Realiza el procedimiento cuando te sientas cansado y desanimado.
Al momento en que nosotros hacemos la limpieza energética del hogar o de la cocina con el palo santo, estamos eliminando aquellas vibras negativas, una forma de atraer la abundancia y que fluya por todo el hogar sin ningún problema. Aunque es común quemar palo santo en casa, es una práctica que puedes hacer en tu zona de trabajo u oficinas. En caso de tener niños menores de 3 años o personas que tengan problemas respiratorios, debemos evitar su uso, ya que podría ser perjudicial para su salud.