Puede ser que la idea de tener un manzano en casa suene un poco descabellada, más cuando no contamos con algún jardín o una extensión muy larga de tierra a nuestra disposición, pero estas excusas ya no son más válidas, gracias a las diferentes técnicas de cultivo que han sido pensadas específicamente para las personas que gozamos de la jardinería pero que no contamos con el espacio al aire libre que se necesitaba para iniciar un proyecto como este.
Sólo bastan siete días y algunos cuantos elementos más para poder despertar todas las mañanas, dar algunos pasos y disfruta de un delicioso desayuno al alcance de nuestra mano, lo mejor de todo es que será fruto (literal) de nuestro trabajo, además, al crecer bajo nuestra supervisión, nos aseguramos de que se encuentre libre de químicos o pesticidas dañinos para nuestra salud.
¿Qué necesitamos para empezar?
- Semillas de manzana madura.
- Papel de cocina.
- Agua.
- Papel aluminio.
¿Cómo lo hacemos?
- Coloca las semillas sobre el papel de cocina y déjalas secar a la sombra por algunas horas.
- Una vez estén completamente secas es muy importante rehidratarlas, para esto las debemos dejar nadar en un recipiente con agua por 24 hrs.
- Pasado el tiempo notarás que algunas semillas flotan hacia la superficie, estas no las vamos a usar.
- Saca los huesitos del fondo del agua, distribúyelos sobre papel de cocina, cúbrelos y humedece.
- Después llévalo sobre una hoja de papel aluminio, envuélvelo muy bien y va directo a la nevera, esto ayudará acelerar el proceso de germinación.
- Es importante que las revises constantemente para asegurarnos que tengas la humedad necesaria, cuando notes que han desarrollado raíces de dos centímetros de largo, es momento de sacarlas del frigorífico.
- Siémbralas en una maceta pequeña con tierra fértil, a un centímetro de profundidad.
- Riega constantemente (casi a diario).
- Al final de siete días ya empezaron a nacer los primeros brotes.
Recomendaciones para su cuidado:
- Asegúrate que el sustrato donde plantes sea rico en nutrientes y tenga un buen sistema de drenaje.
- La casa de tu manzano debe estar a la sombra.
- Manténla protegida, en su etapa de crecimiento es muy susceptible a plagas e insectos.
- Cambia de maceta cuando empiecen a crecer, entre mayor espacio tengan, les será más fácil.
Siguiendo estos pequeños consejos y pasos, dentro de muy poco podrás presumir que te convertiste en toda una granjera.
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