Dejar las sartenes y ollas limpias es toda una proesa, dejarlas tan nuevecitas como la primera vez, resulta casi imposible. Sin embargo tampoco hay que darnos por vencidos y dejarlas llenas de restos de comida que simplemente se negó a salir después de aplicar todos nuestros recursos (esponjas, fibras, cloro y jabón, etc). Es por eso que hoy queremos enseñaros los trucos definitivos que os ayudarán a dejar vuestras ollas y sartenes perfectamente limpias y listas para cocinar. No os asustéis, tampoco se trata de hacer mezclas con ingredientes que puedan poner en riesgo vuestra salud, veréis que son truquitos muy sencillos.
¿Cómo quitar lo quemado de las sartenes y ollas?
Este truco viene de la mano de Bego, La Ordenatriz, la influencer del orden y la limpieza:
Vinagre de manzana para quitar lo quemado de ollas y sartenes
Ingredientes
- C/N de vinagre de manzana
- 1 cdita de bicarbonato de sodio
Procedimiento
- Hay que añadir vinagre de manzana hasta cubrir lo quemado del fondo de la olla o sartén.
- A continuación tenemos que llevar el traste con vinagre al fuego.
- En seguida debemos añadir bicarbonato y dejar actuar la mezcla por toda la noche.
- Una vea pasado el tiempo, hay que enjuagar y frotar con un estropajo.
Vinagre de manzana para limpiar las ollas y sartenes por fuera
Ingredientes
- C/N de vinagre de manzana
- 1 cdita de bicarbonato de sodio
Procedimiento
- Calienta el vinagre y añade el bicarbonato.
- Extiende la mezcla por toda la superficie del traste con ayuda de una esponja o fibra, pon especial atención a las partes resecas o quemadas.
- Deja actuar por 2 horas.
- Frota ligeramente con un estropajo.
¡Y listo! Usando cosas tan sencillas como bicarbonato de sodio y vinagre de manzana, podemos extender la vida útil de nuestras cacerolas, ollas y sartenes. Pero no lo dejéis todo a la hora de limpiar, para facilitaros el trabajo de lavar los trastes, podéis ser más cuidadosos mientras estéis cocinando. Un ojito para que no se queme la comida no le viene mal a nadie. Por otro lado, no olvidéis que debemos hacer todo lo posible para disminuir nuestra huella hídrica, así que hay que esforzarnos por ahorrar agua en la cocina y creedme, todo comienza con lavar los utensilios de cocina de manera adecuada. Además con estos trucazos no tendréis que estropearos el manicure ni gastar tanta energía para deshaceros de los alimentos impregnados en las cazuelas.