Una de las averías más comunes de las lavadoras es el desgaste o rotura de la goma. Con el paso del tiempo y el uso, la goma interna se puede deteriorar y romper, muchas veces empieza a escapar agua, pudiendo pudrir algunas partes de tu lavadora por lo que pes posible que la junta central esté estropeada y que tengamos que cambiarla.
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Este elemento es fundamental para que el electrodoméstico funcione correctamente ya que evita que se produzcan filtraciones de agua cuando está en funcionamiento. Si notas que la puerta no cierra correctamente o que se producen fugas de agua al poner en funcionamiento la lavadora, es hora de cambiar esta pieza.
Es por este motivo que te enseñaremos cómo reemplazar esta pieza sin muchos problemas. Debes tener en cuenta que la goma nueva debe ser adecuada para tu lavadora, lo ideal es que sea idéntica. Para ello, puedes apuntar la marca y el tipo de electrodoméstico, antes de ir a comprarla. Las lavadoras pueden tener distintos tipos de juntas, pero casi todas tienen una abrazadera exterior que tenemos que extraer para cambiar la goma. Para ello vamos a levantar un poco la goma y soltaremos la abrazadera introduciendo algún objeto. En nuestro caso, hemos utilizado un desmontable de la bicicleta.
Para poder retirar la abrazadera interior, doblamos la goma hacia el interior y retiramos el muelle que la envuelve haciendo palanca. Una vez que hemos retirado la abrazadera, sacamos la goma hacia afuera. Una vez extraída, debemos observar las flechas que tenemos en la lavadora y en la goma. Le damos la vuelta y la colocamos en la posición uniendo las flechas y encajando bien.
Ahora que la goma ya está en el carril, colocamos el muelle interior que hemos quitado anteriormente. Podemos ayudarnos con el extensible hasta colocarla perimetralmente. Tenemos una boca en la goma que tenemos que encajar arriba. Para facilitar el trabajo le aplicamos agua jabonosa así es más fácil de encajar. Para finalizar, amarramos la parte exterior con la abrazadera y apretamos bien. Listo problema solucionado.
Ten en cuenta que no solo las filtraciones de agua pueden deteriorar tu electrodoméstico, sino que existen muchos factores que pueden acelerar este proceso. Por ejemplo, las cremalleras, los botones o los cordones entre otros, dañan el interior por el constante golpeteo. La ropa que incluya piezas metálicas se debe lavar dentro de una bolsa de malla. Es aconsejable limpiar en profundidad el interior de la lavadora periódicamente.