Todas las cosas con el uso y el paso del tiempo se van deteriorando, en el caso de los cuchillos, van perdiendo su filo lo que ocasiona que cada vez sea más difícil cortar los alimentos.
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Cuando un cuchillo pierde su filo, además de volverse algo molesto a la hora de cocinar, resulta ser aún más peligroso que cuando está bien afilado, por eso mantener los cuchillos con un buen filo en la cocina no solo facilitará el trabajo sino que también es una cuestión de seguridad.
¿Con qué frecuencia se debe afilar los cuchillos?
El hecho de que un cuchillo se desfile es completamente normal, claro que existen ciertos factores que pueden acelerar este proceso, tales como:
- El material con el que están elaborados.
- Cortar sobre superficies duras.
- Ejercer presión lateral sobre la hoja.
- Corrosión por algún ácido como el del limón, tomate u otro alimento.
- El ser sometidos a altas temperaturas.
El afilar los cuchillos es una práctica a la que no se le da demasiada importancia, es común esperar hasta que el cuchillo ya no corte absolutamente nada para darle el mantenimiento que requiere, sin embargo, para siempre mantenerlos en buen estado es recomendable sacarles filo a tus cuchillos una vez al mes.
Si quieres comprobar si es momento de afilarlos puedes hacer la prueba del papel; toma una hoja de papel con una mano y con la otra el cuchillo, desliza para cortar, si está realmente afilado logrará hacer un corte limpio en el papel, de lo contrario solo lo rasgara. Puedes hacer también la prueba con un tomate, con un cuchillo correctamente afilado puedes hacer un corte fácilmente.
Afila tus cuchillos sin herramientas
Actualmente hay en el mercado una muy amplia variedad de herramientas para poder afilar tus cuchillos, las más comunes son las piedras o las chairas. Sin embargo existen otras formas en las que puedes afilar tus cuchillos sin tener que gastar en alguna herramienta.
Antes de comenzar el proceso de afilado es necesario revisar que el cuchillo en cuestión no presente mellas o hendiduras en la hoja, ya que en dicho caso se requerirá de un profesional para hacerlo. Si tu cuchillo no presenta ningún desperfecto está listo para que lo afiles tu mismo.
Lo que debes saber y aplicar para cualquier forma de afilado son los siguientes puntos:
- Debes de sujetar muy bien el cuchillo por el mango.
- Coloca el cuchillo sobre el afilador que vayas a utilizar e inclinalo de unos 40 a 45 grados.
- Desliza el cuchillo sobre el afilador comenzando por la parte más gruesa y terminando por la punta. Repite un par de veces más.
- Inclina el cuchillo hacia el otro lado y repite nuevamente el paso anterior.
- Repite de 10 a 20 veces.
Para que afiles tus cuchillos con artículos que puedes tener en casa estas son las más efectivas.
Lima de uñas.
Las limas de uñas son una buena opción para revivir el filo de tus cuchillos. En una superficie plana coloca un trapo y sobre este la lima para evitar que se mueva durante el proceso, únicamente repite los pasos descritos anteriormente de 10 a 20 veces y enjuaga tu cuchillo.
Taza o plato
Si en casa tienes una taza o plato de cerámica, colócalo sobre un trapo boca abajo, ubica la orilla que no esté pintada o que en su defecto se sienta más rasposa que el resto y sobre esta orilla desliza el cuchillo como se describe en la parte de arriba.