Para aficionados a la cocina no existe una receta dulce más sencilla que el bizcocho ¿verdad? Sin embargo, este clásico de la gastronomía en todo el mundo esconde una serie de trucos que nos permiten garantizar dos de los objetivos claves de cualquier bizcocho: que sea alto y esponjoso. Sigue leyendo para conseguir un resultado perfecto.
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Los pasos previos
Aunque no lo creas el primer truco es de lo mas sencillo y suele pasar desapercibido: precalentar el horno a temperatura media. No restes importancia a este paso, es fundamental para que la cocción sea uniforme. El segundo truco, tan simple y tan incómodo que solemos también dejarlo para el final: prepara un molde de unos 24 centímetros, engrásalo y cúbrelo con una fina capa de harina.
No dejes la receta a la improvisación, sé metódico
Huevos, azúcar y harina. ¿Fácil no? Pues el tercer truco será comprobar si los productos para cocinar el bizcocho son de calidad. Para saber, por ejemplo, si los huevos son frescos podemos colocarlos en un bol con agua y verificar que no flotan. Truco número cuatro: las cantidades son decisivas. Debes calcular en esta receta 30 gramos de azúcar y 30 gramos de harina para cada huevo. Para un molde como el que comentamos más arriba necesitarás ocho huevos.
Batido, la clave de todo bizcocho
El truco cinco hace referencia otro aspecto básico: la harina. Se recomienda que esta sea de fuerza o especial de repostería y que esté tamizada. En sexto lugar, debemos considerar el batido del bizcocho. En el momento de mezclar huevos y azúcar añadimos algún tipo de saborizante: ralladura de limón o esencia de vainilla. Este es el momento correcto de hacerlo. En séptimo lugar, debemos conseguir el efecto tan ansiado en un bizcocho perfecto: el aire. Para ello debemos dejar a un lado la pereza y batir enérgicamente unos 10 minutos y conseguir el famoso punto letra.
Paciencia y delicadeza en los últimos pasos
Truco número ocho: añadimos la harina. Aquí debemos aplicar un punto de delicadeza y paciencia e incorporar la harina poco a poco, de otra manera acabaremos con el aire y con todo el esfuerzo previo. Lo hacemos con movimientos envolventes. El siguiente truco requiere rapidez y haber cumplido los primeros pasos: inmediatamente después de tener integrados los ingredientes colocamos la masa del bizcocho en el molde previamente engrasado y enharinado y al horno.
El penúltimo consejo o truco es prestar atención al tamaño del molde: la mezcla no debe superar los 3/4 de alto del recipiente. Y, en último lugar, la cocción: debe ser de unos 35/40 minutos y esperar a que los bordes se contraigan. Para desmoldarlo, no seas ansioso y espera 15 minutos. Verás como logras un bizcocho perfecto.