Ya sean fritas, al horno, hervidas o simplemente en puré, sin lugar a dudas las patatas son las preferidas de la mayoría para acompañar las comidas. No solo se pueden comer como plato único sino que además las puedes combinar con una gran variedad de carnes, verduras o pescados y en esta ocasión en tan solo cinco pasos te contamos cómo hacer unas patatas crocantes al horno.
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Para preparar unas deliciosas patatas podrás elegir entre prepararlas con piel o sin piel. Si eliges hacerlas con piel debes prestar mucha atención a que queden debidamente lavadas preferiblemente cepilladas, para que no quede tierra. Las puedes combinar con unas deliciosas salsas para probar nuevos sabores y recuerda que en esta receta el condimento es vital.
La idea de hacerlas al horno ya que, además de ricas, son más sanas que fritas porque no llevan tanto aceite. En el horno quedan bien secas y crujientes por la forma de cocción, y no van a almacenar ningún tipo de líquido como si las hiciéramos hervidas. Vamos con los ingredientes que vas a necesitar para preparar esta verdura tan versátil.
Ingredientes
- 1 patata por persona
- Aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
- Pimentón
- Provenzal
Preparación
Lo primero que debemos hacer es lavar y pelar las patatas que no quede ningún rastro de tierra en ellas, puedes dejarlas con piel si lo deseas, de esta manera mantienen más sus sabores y proteínas, pero deberán estar bien limpias, luego rebanar las patatas con una medida de medio centímetro de grosor.
Mientras preparas tus patatas enciende el horno a 180 grados, cuando ya están perfectamente lavadas y troceadas, secarlas bien en un trapo limpio, colocarlas en un placa para horno y agregarles, aceite de oliva y todos los condimentos, mezclar bien y ponerlas en el horno hasta que estén doradas.