Lamentablemente, estamos disfrutando de los últimos días del verano, lo que significa que dentro de muy poco tendremos que decirle adiós a las tardes de sol y los bañadores, para darle la bienvenida al frío y las hojas secas. Pero no todo es malo, porque el otoño nos ofrece la excusa perfecta para destapar una buena botella vino y compartirla con nuestros seres queridos, al color del hogar o en algún restaurante que nos haga sentir como en casa.
Por supuesto, cuando hablamos de vino, existen distintas clases, por ejemplo blanco, rosado, espumoso, generoso y tinto. Aunque cada uno de ellos contiene distintas notas aromáticas y sabores diferentes, solo uno es el mejor para disfrutar durante el otoño.
¿Quieres descubrir de cuál se trata? Sigue leyendo, que aquí debajo te tenemos la respuesta.
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Vino tinto
Los tintos son vinos preparados con uvas tintas (de ahí su nombre) su proceso de fermentación alcohólica demora entre ocho y 15 días. Pasado este tiempo, se almacena en barriles o barracas donde es conservado por distintos factores de tiempo según la intensidad del sabor que se busque conseguir.
Además de un delicioso sabor ideal para acompañar las tardes de otoño, numerosos estudios en medicina han comprobado la ingesta moderada de vino tinto puedo ayudar a prevenir enfermedades cardiovasculares, reducir los signos de la edad y mejorar las funciones neuronales del cerebro gracias a la increíble concentración de antioxidantes.
Cómo puedes darte cuenta, el vino tinto es la bebida que no puede faltar en la cocina para la temporada otoñal, pero si no eres fanática de los sabores intensos, puedes utilizarlo en distintas preparaciones