Las bebidas energizantes o hipertónicas contienen sustancias estimulantes que, se supone, que disminuyen la sensación de fatiga y agotamiento tras la práctica de deporte. Pero las sustancias con las que se fabrican, no siempre son buenas para el cuerpo humano, puesto que una bebida energética puede contener la cantidad de cafeína equivalente a unas 4 tazas de café.
Te podría interesar
En España, 4 de cada 10 jóvenes entre 14 y 18 años toman bebidas energizantes o hipertónicas, y en muchos casos las mezclan con alcohol, sin tener en cuenta el riesgo que supone, ya que consumir bebidas energéticas disminuye la sensación de intoxicación y provoca el consumo excesivo de alcohol y sus consecuencias.
Efectos nocivos de las bebidas energizantes
Entre los efectos negativos que el cuerpo humano puede padecer por el mal consumo de estas bebidas se encuentran, taquicardias, náuseas, vómitos, diarreas, dolor de cabeza, dificultad para dormir, arritmias, convulsiones y muerte súbita por accidente cerebrovascular.
Las bebidas energizantes, si se consumen para sentirse más alerta, aumentar la resistencia física, tener mayor concentración y reacción y por supuesto, retrasar el sueño, están compuestas principalmente por cafeína, glucosa, taurina y glucuronolactona.
La cafeína y sus efectos negativos
La cafeína es el peor de todos los compuestos que contienen las bebidas energizantes, principalmente por ser un fuerte estimulante del sistema nervioso central, de los músculos respiratorios y esqueléticos y del corazón. Aunque es cierto que se sigue consumiendo porque aporta energía, mejora el estado de ánimo, la imaginación, la motivación y a ser mucho más eficientes. Pero el resto de compuestos también afectan al organismo.
La eliminación total de la cafeína del organismo no se produce hasta pasadas las 12 o 24 horas de la ingesta de la bebida energizante, aunque depende de muchos factores personales como el peso, la cantidad de comida ya consumida y la edad.