El café es el principal protagonista en la mayoría de los desayunos y meriendas, lo que siempre suele ocurrirnos es que el realizado en nuestro hogar nunca es igual al de las cafeterías y restaurantes, lo que se nos torna un poco frustrante. Una de las características que destacan los cafés de estos lugares es la espuma de leche, que se hace con vaporizadora, como en nuestros hogares no solemos tenerla, nuestro café nunca se ve igual, pero no te preocupes, hoy te enseñaremos cómo hacerla sin una máquina especializada.
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No muchos lo saben, pero existen varios trucos a partir de los cuales puedes hacer una espuma de leche casera de forma fácil y rápida, tan solo necesitas un microondas, un frasco, una cuchara y un poco de leche. Con solo estas cuatro cosas podrás desde tu hogar darle un toque distinto al café, haciéndolo más suave y espumoso.
¿Cómo podemos hacer espuma en la leche?
Comienza limpiando un frasco de 250 ml muy bien con agua y detergente, enjuágalo y déjalo secar por unos minutos. Llena el recipiente con 170 ml de leche, cierra el frasco lo más herméticamente posible y sacúdelo enérgicamente durante 30 segundos para que se oxigene el líquido, debes tener en cuenta que la leche casi debería duplicar su volumen.
Luego tienes que quitar la tapa del frasco y colocarlo en el microondas, después debes calentar la leche a potencia máxima durante 30 segundos. El calor hará que la leche se vuelva espesa y espumosa, obteniendo resultados casi iguales a los que te dará una vaporizadora de cafetería, por menor costo.
Y listo, ya puedes abrir el frasco y sacar la espuma de la leche con una cuchara, luego colocarla sobre el café y disfrutar de una bebida especial. El resultado que obtendrás con esta preparación será muy profesional y estará mejor que el café capuchino de cafetería, por lo que podrás sorprender a todos tus invitados con esta fácil elaboración.