Encontrar bolitas de alcanfor o naftalina en los baúles y roperos de las abuelitas era muy común. Ahora este remedio casero se ha visto desplazado por los insecticidas comerciales. Sin embargo, los nuevos productos no siempre son los mejores para mantener al margen insectos como las cucarachas o las polillas. A veces es mejor darle una mirada al pasado y aprender de los trucos de las abuelas, es por eso que ahora queremos darte unos tips para ahuyentar a las cucarachas usando el alcanfor, una planta asiática milenaria reconocida por su delicioso aroma.
¿Qué es el alcanfor?
El alcanfor en realidad es un compuesto químico que es obtenido principalmente del árbol de alcanfor o Cinnamomum camphora. Esta sustancia tiene un sinfín de usos, pues incluso el alcanfor ha sido utilizado durante siglos en el ámbito de la medicina y cosmética. Sus propiedades medicinales incluyen acciones analgésicas, antiinflamatorias y antisépticas, lo que lo convierte en un ingrediente perfecto para aliviar dolores musculares, congestión nasal y afecciones cutáneas. Además, es empleado en la industria del perfume y aromaterapia debido a su aroma fresco y refrescante. Sin embargo, uno de los usos que también tiene el alcanfor es el de ahuyentar cucarachas, pues el aroma que esta planta expide es desagradable para este tipo de insectos.
¿Cómo usar el alcanfor para ahuyentar cucarachas?
La forma correcta de usar el alcanfor para eliminar las cucarachas es tomar unas hojitas de esta planta y envolverla. Para esto puedes ocupar saquitos de tela o algún trozo de papel pergamino, simplemente agrega unas 3 o 5 hojitas de alcanfor y guárdalas en los sitios donde aparezcan las cucarachas. Sin embargo, tendrás que cambiar estas hojitas con regularidad.
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Otra opción es triturar las hojitas hasta volverlas polvo y guardarlo en bolsitas, después cuélgalas en tu alacena o ropero. Y listo, de esta manera mantendrás a las cucarachas y polillas lejos de tu ropa y alimentos, además tus prendas quedarán con un aroma suave y fresco. También puedes quemar las hojas de alcanfor a modo de incienso.
Contraindicaciones del uso del alcanfor
De acuerdo con el New Jersey Department of Health and Senior Services, el uso excesivo o incorrecto de las hojas de alcanfor puede causar algunos problemas en las vías respiratorias, por ejemplo, irritación en la nariz y garganta que se deriva en una respiración con silbido. Otros riesgos son a nivel dérmico, ya que puede irritar la piel y los ojos. También podemos experimentar dolor de cabeza, náuseas, confusión mental, pérdida del conocimiento y a largo plazo puede dañar nuestro sistema nervioso, afectaciones a nivel renal, convulsiones y en algunos casos, la muerte. Es por eso que no se recomienda su uso si hay niños menores de 2 años, embarazadas o personas que experimenten episodios de epilepsia o Parkinson. Recuerda suspender el uso de las hojas de alcanfor al primer síntoma de alergia.