Las canas son esos cabellos blancos que aparecen sin venir a cuento y que tantas polémicas desatan. En la actualidad el mundo está dividido entre las personas que deciden aceptarlas y lucirlas en peinados diferentes e innovadores. Mientras que hay otra parte del mundo que opta por taparlas con tintes artificiales o naturales.
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Respecto a las personas que deciden por teñir las canas, una de las tendencias que están ganando protagonismo, son los tintes elaborados con la técnica henna, perfecta para todo tipo de cabellos, consiguiendo rejuvenecer el rostro de la mujer que se lo tiñe.
En esta técnica de tinte, se utiliza un producto natural, la henna, que es un tinte que se prepara con la planta Lawsonia inermis, o también conocida como arjeña o alheña. Este producto se emplea desde la antigüedad para teñir la piel, el cabello y las uñas. En el cabello, actualmente, los tintes de henna se comercializan mucho en la India, Oriente Medio, Europa, Australia, Canadá y Estados Unidos. Pero cada vez están ganando más terreno en Europa.
La técnica henna se caracteriza por ser un método de tinte 100% natural y ser sostenible con el medioambiente y, sobre todo, con los folículos capilares del cabello. La henna se emplea para esconder los pelos blancos en hombres y mujeres, con una metodología deslumbrante y de fácil aplicado. Además, la henna también protege el cabello y reduce el impacto de factores externos que lo dañan y maltratan (como por ejemplo sal del agua del mar o cloro de las piscinas), gracias a sus propiedades naturales.
La receta para aplicar esta técnica de henna en el cabello, para cubrir las canas es, mezclar una cuarta parte del contenido de un sobre de henna, en un recipiente con agua caliente. Hay que mezclarlo bien para conseguir una mezcla homogénea que aplicar en el cabello, separándolo en secciones con pinzas, para facilitar su aplicación. Una vez puesto en el cuero cabelludo, hay que dejar actuar durante 1 hora, y enjuagar con agua tibia. Lo mejor es repetir el proceso cada 30 días.