A todos los perros les gusta que compartamos algo de nuestra comida con ellos. Cada vez que se da la oportunidad, les gusta ser consentidos con algún bocadillo o alguna golosina que los entretenga. Lo cierto es que hay que tener cuidado porque no toda nuestra comida les hace bien a nuestras mascotas.
De hecho, muchos de nuestros alimentos pueden provocarles una serie de malestares o promover algunas enfermedades que pueden ocasionaralgún cuadro grave en nuestros perros. Los expertos de la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad contra los Animales (ASPCA) desaconsejan dar ciertos alimentos a los perros, ya que pueden causar problemas de salud a corto y largo plazo, debido a que su capacidad de metabolizar la comida es diferente a la de los humanos.
Entre esos alimentos se destacan algunas verduras que, si bien los perros pueden comerlas y de hecho de varias de ellas requieren de sus vitaminas por su dieta omnívora, su ingesta se debe supervisar y elegir las indicadas. A continuación, te presentamos en principio tres verduras que te aconsejamos no le des a tus mascotas, según recomendaciones de expertos veterinarios y de crianza de American Kennel Club y ASPCA.
Los espárragos, aunque no son perjudiciales para la salud en general, los expertos afirman que no sirve de nada dárselas, ya que son duras en crudo y demasiado blandas cuando se cocinan, perdiendo todos sus nutrientes en el proceso. Otra de las verduras que hay que evitar son los hongos, ya que muchas especies de setas pueden ser toxicas para los perros si las ingieren, y algunas causan lesiones graves o incluso la muerte. Aunque las setas blancas de supermercado que han sido lavadas pueden ser seguras para los perros, es mejor pecar de precavido y evitar dárselas a su mascota.
Cebollas y ajos, quizás las más perjudiciales. Estas dos verduras pueden causar molestias gastrointestinales, daños en los glóbulos rojos, vómitos, diarrea, dolor de estómago y náuseas. Son de las más perjudiciales para nuestras mascotas por su imposibilidad de metabolizarlas. Presta especial atención en que nunca lleguen a ellas.