Los huevos son un elemento indispensable en nuestra dieta y si lo piensas casi no existe plato en nuestro día a día que no lo lleve. Ya sea en el huevo revuelto del desayuno, en la tortilla de patatas del mediodía o en las sopas de la noche, todas nuestras comidas están acaparadas por el huevo.
Lo primero que hay que saber es cuánto tiempo puede ser conservado un huevo fuera de la nevera previo a su consumo. Se estima que a partir del mes comienzan a perder sus propiedades, esto no quiere decir que no pueda ser consumido, pero si se encuentra al exterior mucho tiempo a altas temperaturas pierden agua y consistencia. Por lo que lo primero que debes hacer al momento de arribar a tu hogar luego de la compra del supermercado es colocar los huevos en la nevera.
Ahora bien, existe un truco infalible de lo más elemental que te podrá ayudar a escoger tus huevos. Estamos hablando de un vaso con agua y simplemente ver si el huevo en cuestión se hunde hasta el fondo o si queda flotando arriba. Además de poder notar si está fresco también notaremos si está apto para el consumo. El proceso es de lo más simple y rápido.
Por ejemplo: Si el huevo inmediatamente se hunde y en el fondo se queda en posición horizontal el huevo está fresco y evidentemente apto para el consumo. En caso de quedar inclinado sigue siendo apto pero ha perdido su frescura. Finalmente si el huevo se mantiene flotando arriba deshazte inmediatamente de esos huevos porque ya no son consumibles.
Es muy importante tener en cuenta este tip ya que el huevo es casi elemental para realizar los platos más deliciosos, y si la calidad del huevo no es la correcta el plato completo podría verse arruinado.