El queso azul o roquefort es un gran aliado para la cocina cuando queremos darle un toque diferente a nuestras recetas. Además de tener un particular e inconfundible sabor, el queso azul es recomendado por muchos por sus incontables particularidades. Se trata de un ingrediente altamente rico en grasas saturadas, por lo que no es recomendable en exceso. Aunque entre sus componentes benéficos encontramos su alto contenido en calcio, vitamina D, sodio y cinc, entre otros.
El roquefort o queso azul se elabora a partir de la fermentación de la leche hasta que se libera una serie de baterías que le dan su sabor y aroma tan particular. Por su parte, el pescado tiene tantas proteínas como la carne, además de ser rico en vitaminas y minerales. Sumado a ello es una gran fuente de Omega 3, ácidos grasos beneficiosos para la salud cardiovascular. Por eso, además de delicioso, este platillo que hoy te proponemos cuenta con una extensa lista de vitaminas, minerales y aportes a la salud.
Ingredientes:
- 4 filetes de merluza
- 250gr de queso azul o roquefort
- 1 kilo de patatas
- 400ml de crema de leche o nata
- 1 cebolla
- 1 puñado de perejil fresco
- 1 copa de vino blanco
- 50gr de mantequilla
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Paso a paso:
Pelamos y cortamos las patatas en gajos rústicos. Las cocinamos en el horno sobre la mitad de la mantequilla de la receta. Vamos controlando hasta que estén doradas. Mientras en una sartén colocamos el resto de la mantequilla y cocinamos a fuego bajo los filetes. Los sellamos hasta que estén cocidos y retiramos del fuego. En la misma sartén agregamos la cebolla picada bien pequeña y salteamos hasta que esté dorada. Agregamos la copa de vino blanco y dejamos cocinar a fuego bajo por cinco minutos, hasta que el alcohol se evapore. Agregamos la crema de leche, el queso roquefort desmenuzado, el perejil picado y mezclamos hasta que se fundan todos los ingredientes. Agregamos los filetes de merluza sobre la salsa y dejamos marinar a fuego bajo para que los sabores se impregnen. Cuando las patatas estén listas, servimos colocando los filetes sobre crema de roquefort en el plato y a un lado, las patatas al horno.