Las comidas para todos los días pueden ser satisfactorias si obtenemos algunos datos para manipular correctamente los ingredientes, como en el caso de la carne de pollo ¡que no quede seca! La carne de pollo es virtuosa, porque no posee grasa, las pechugas es una de las partes más magras.
La carne de pollo contiene bajo contenido en grasas comparativamente con la carne roja, siempre evitando la piel del pollo. El pollo es rico en fósforo, nos ayuda con la salud de los dientes y huesos, también a los riñones y el hígado. Contiene una alta cantidad de retinol, alfa y beta-caroteno, licopeno, todos los derivados de la vitamina A,esencial para potenciar nuestra salud visual ¡más de un motivo para hacer esta receta y aprovechar las virtudes de la carne de pollo!
Ingredientes:
2 pechugas de pollo
1 limón
sal y pimienta
aceite
Opcional: mostaza y miel
Paso a paso:
Tomamos las pechugas de pollo, podemos hacerlas bifes o abrirlas por completo. Siempre que tengamos una pieza más ancha tomará más tiempo que se cocine por completo. Sazonamos los bifes de pechuga de pollo y con una sartén le colocamos aceite, un poco y lo esparcimos por toda la superficie. Cuando esté caliente sellaremos la carne de pollo, de una lado y del otro. Debe quedar dorada, luego bajamos el fuego y terminamos de cocinar. Agregamos un poco de zumo de limón para darle sabor. También puedes pintar las pechugas de pollo con un poco de mostaza y miel ¡y listo!. La cocción de la pechuga completa requiere unos 20 minutos como mínimo, en bifes será menor el tiempo de cocción. Prepara las ensaladas y a comer rico.